sábado, 15 de noviembre de 2008

¡¡El Fascismo no puede, no debe pasar!!

Las nuevas generaciones de bolivianos no conocen todavía el rostro y la cara bestial del nazifascismo que amenaza a todos los pueblos que luchan por su independencia y su libertad.

Como perros de presa del imperialismo que son los fascistas, lo primero que los delata es su furibundo racismo que en el caso de los arios tiene un fundamento racial muy claro. En cambio en nuestros pueblos el racismo adquiere una sustancia tan ridícula que estamos dispuestos a desenmascararla definitivamente. El fascismo clásico es de origen alemán y se llama nazismo hitleriano y tuvo como principal “virtud” costar 50 millones de víctimas a la humanidad en la Segunda Guerra Mundial. El fascismo propiamente dicho es el italiano del bufón Musolinni y finalmente el tercero europeo es el español del infeliz Francisco Franco y su falange española. En América Latina el fascismo tuvo sustento militar dependiente en el llamado ciclo militar de la Seguridad Nacional. En el siglo XXI, el fascismo como perro de presa del imperialismo tiene tintes claramente separatistas, regionalistas y también racistas de lo más decadente.

En efecto, como lo define el camarada Jorge Dimitrov, el fascismo es:

«La dictadura terrorista abierta de los elementos más reaccionarios, más chovinistas y más imperialistas del capital financiero. El fascismo alemán no es solamente un nacionalismo burgués, es un chovinismo bestial. Es el sistema de gobierno del bandidaje político, un sistema de provocaciones y torturas contra la clase obrera y los elementos revolucionarios de la pequeña burguesía y de los intelectuales. Es la crueldad y la barbarie medieval, la agresividad desenfrenada contra los demás pueblos y países… El fascismo es el poder del propio capital financiero. Es la organización del ajuste de cuentas terrorista con la clase obrera, el sector revolucionario de los campesinos y de los intelectuales. El fascismo es la reacción feroz y la contrarrevolución.. El fascismo es el peor enemigo de la clase obrera y de todos los trabajadores….» (Dimitrov. «Obras escogidas». Tomo I. Pàgs. 579 y siguientes)

Los colmillos y las orejas de lobo del fascismo criollo, han hecho su siniestra aparición en nuestro país. Bolivia, el estado/nacional con más población indígena y originaria paradójicamente ha incubado un racismo repugnante que estamos en la obligación de denunciar y castigar. Sucre la ciudad blanca y “culta” del pasado ha sido escenario de verdaderas aberraciones fascistas. Hemos podido ver a cholos y mestizos descendientes de cholas, escupir a los humildes campesinos chuquisaqueños, hemos visto a mestizos de origen indígena vociferar contra los indios, hemos visto azorados cómo pobres de solemnidad atacaban a otros pobres por encargo de los ricos.

Basta observar los rostros de los “jóvenes cruceñistas” para adivinar sus intenciones, basta escuchar a los Guiteras, a los Costas, a los Marincovich para comprender hasta qué punto llega la iracundia feroz y genocida de los fascistas de tierra adentro, basta escuchar los improperios que salen de las bocas/cloacas de esos enajenados para comprender lo que les espera a los bolivianos si estos sujetos llegan al poder.

La desesperación de los oligarcas de perder sus privilegios los ha llevado ya a organizar escuadras fascistas y lo más cómico es que se proclaman “demócratas”. Es pues risible escuchar la palabra democracia en la boca de los fascistas.

Hay que recordar aquella sentencia fascista de la Alemania hitleriana que rezaba: “Cuando oigo la palabra cultura, cargo mi revolver”. Los universitarios bolivianos deben conocer estas manifestaciones “culturales” del fascismo.

Por su parte Hitler decía:

«Habrá que instituir una técnica del despoblamiento. Me preguntareis lo que significa “despoblamiento”, y si tengo la intención de suprimir a naciones enteras. Pues bien, si, es más o menos eso. La naturaleza es cruel, tenemos por tanto el derecho de serlo también. En el momento en que lance en el huracán de hierro y de fuego de la guerra futura a la flor del germanismo, sin que yo siente pesar alguno por la preciosa sangre que correrá a raudales, ¿quién podría impugnarme el derecho de aniquilar a millones de hombres de razas inferiores que se multiplican como insectos y que, por lo demás, no haré exterminar, pero cuyo crecimiento impediré sistemáticamente….» («Hitler me dijo». Herman Rauschning. Págs 123 y 124)

Frente al fascismo, no hay términos medios y quiénes piensan que se puede “dialogar” con los fascistas tendrán que sufrir las consecuencias horrorosas de su gravísimo error. Los verdaderos comunistas de Bolivia estamos dispuestos a enfrentar en todos los terrenos esta plaga social que amenaza la propia existencia de nuestro país en beneficio del capital financiero internacional que tiene sus sirvientes y operadores en nuestro país los cuales ya han levantado cabeza como producto de la ingenuidad de algunos personeros del propio gobierno.

En cuanto a la aprobación de la nueva Constitución Política del Estado, nuestro Partido decide APROBAR la misma y preparar la campaña por el ¡SI!, rotundo en el Referéndum.

De igual modo, en la perspectiva de un Referéndum revocatorio para las autoridades electivas, decidimos claramente por la RATIFICACION del presidente Evo Morales y la REVOCATORIA del Prefecto traidor José Luís Paredes en La Paz, así como de los prefectos de la llamada “Media Luna”, principalmente para el paramilitar Manfred Reyes Villa de Cochabamba.

¡¡El Fascismo no puede, no debe pasar!!
¡¡La izquierda se une en defensa de la Unidad de la Patria!!


Desde las trincheras antifascistas.
Bolivia. Diciembre de 2007.
C.C. del PC mlm.

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